Las pacientes que presentan un gran volumen en sus mamas y muchas veces les ocasiones dolores en la columna se pueden tratar mediante una “reducción mamaria”.
Esta técnica consiste en sacar parte de los tejidos glandulares y de piel sin que se comprometa la sensibilidad y poder de lactancia.
El paciente se opera en sanatorio pudiendo quedar internado hasta el otro día y la recuperación implican 2 semanas.